Sin una lágrima en los ojos y con escasa expresión de arrepentimiento, Carmen Jiménez fue sentenciada este martes a 30 años de prisión. La decisión fue emitida por el Tribunal Colegiado de La Altagracia tras hallarla culpable del asesinato de su sobrino.
El menor, de apenas ocho años, murió a consecuencia de múltiples actos de violencia. Según los informes médicos, presentaba un total de 147 heridas, además de señales claras de maltrato físico extremo.
Después de conocer el fallo, Jiménez se arrodilló por unos segundos al lado del banquillo de los acusados. Luego, sostuvo una conversación con su abogado defensor, sin mostrar señales de conmoción o pesar por el crimen cometido.
Al salir de la sala, fue escoltada por agentes de seguridad. Llevaba esposas, cadenas en la cintura y un casco protector. El dispositivo buscaba prevenir cualquier intento de agresión por parte de familiares del menor o del público presente.
El niño vivía bajo custodia de Carmen Jiménez en el momento de su fallecimiento. El informe forense detalla que sufrió múltiples tipos de heridas y traumas, además de seis pérdidas dentales. Murió por shock hemorrágico, hipovolémico y séptico.
El Ministerio Público afirmó que Carmen Jiménez reconoció haber golpeado al menor de forma constante. Según explicó, lo hacía porque el niño tenía supuestos problemas de conducta.
Su pareja, González Valentín Rojas, también está implicado en el caso. Se le acusa de encubrir el crimen. Ambos enfrentan cargos por violaciones a múltiples leyes dominicanas, entre ellas disposiciones sobre tortura, protección infantil y uso de armas.
El padre del menor, Santiago Jiménez, declaró que confiaba en su hermana para el cuidado del niño. También afirmó que le enviaba dinero para la manutención del menor, aunque no lo veía desde noviembre del año anterior.
El niño murió la noche del viernes 13 de octubre. El caso está siendo investigado por el Ministerio Público, bajo la dirección de la fiscal Claudia Garrido, junto a los fiscales Silveria Poueriet R, Hendrich Ramírez, Aneurys Castillo, Alba Mota y Víctor Camacho.
El levantamiento del cuerpo fue realizado por el doctor Polanco Guzmán y agentes de la Policía Científica. También participó la doctora Pamela Dalle Grave, quien confirmó las causas de muerte en el acta forense.
La acusación incluye los artículos 59, 60, 295, 296, 297, 303-4 numerales 1 y 2, 330, 331 del Código Penal. Además, los artículos 396 literal A de la Ley 136-03 y 83 y 86 de la Ley 631-16.
Carmen Jiménez cumplirá su condena en la Cárcel Pública de Mujeres de Higüey. Por su parte, González Valentín Rojas deberá cumplir la medida en el Centro de Corrección y Rehabilitación de Anamuya.
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