Arlington, Virginia. Una densa columna de humo negro sorprendió a los residentes del área metropolitana de Washington D.C., luego de que una camioneta de reparto de Amazon se incendiara mientras transitaba por Clark Street South, cerca de la intersección con 23rd Street South, en Arlington, según informó Daily Mail.
El vehículo, una Mercedes-Benz Sprinter negra a gasolina, ardió rápidamente a plena luz del día, generando preocupación entre transeúntes y vecinos, al tratarse de una zona urbana de alta circulación.
Las llamas se extendieron hasta unos arbustos cercanos, pero gracias a la rápida intervención del cuerpo de bomberos, no se reportaron daños a edificios ni personas lesionadas.
El Departamento de Bomberos y Servicios Médicos de Emergencia de Arlington confirmó que el incidente se debió a un fallo en el motor. Aclararon que no hubo explosión ni paquetes afectados, lo cual descartó inicialmente riesgos de carga peligrosa o materiales inflamables dentro del vehículo.
El suceso, que no pasó desapercibido para los residentes del área, fue visible desde kilómetros de distancia, especialmente desde los suburbios del noreste de la ciudad, donde varias personas captaron el humo con sus teléfonos móviles.
Este hecho revive las alertas sobre la seguridad de ciertos modelos de la línea Sprinter. En 2023, Mercedes-Benz ordenó el retiro de 53,000 unidades correspondientes a los años 2019 y 2020, tras registrarse al menos 11 casos de incendios similares.
El fabricante había advertido sobre un problema en la disposición de los fusibles, que podía causar sobrecalentamiento del sistema de control de clima y provocar incendios.
Aún no se ha confirmado si la unidad siniestrada formaba parte de los vehículos incluidos en ese retiro oficial. Las autoridades locales indicaron que se abrirá una investigación formal para determinar con precisión las causas del fuego y si existe relación con los defectos previamente identificados.
El incidente no interrumpió el tránsito por un largo período, pero sí generó alarma momentánea en la comunidad. La empresa Amazon no ha emitido comentarios públicos hasta el momento sobre lo ocurrido ni ha confirmado si la camioneta pertenece a su flota directa o a un contratista de servicios logísticos.
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