Gabriele Cristine Barreto de Freita, de 24 años, falleció tras sufrir quemaduras de tercer grado en la bañera de un motel en São José dos Pinhais , en la Región Metropolitana de Curitiba, Brasil.
Ingresó en un hospital de la capital la madrugada del 25 de mayo y permaneció hospitalizada seis días, hasta su fallecimiento.
La joven, madre de un niño de cinco años, vivía con su madre, Iolanda Barreto. La abuela del niño pidió justicia por la muerte de su hija. “Si pudieran hacer justicia, sería bueno. Sé que no la traerán de vuelta, pero espero que se haga justicia“, dijo.
Según informes, Gabriele estaba acompañada por un hombre que conoció en una fiesta la semana anterior. La pareja fue al motel por invitación suya.
Al llegar, encendieron la calefacción de la bañera, pero decidieron ducharse. El hombre salió primero, se acostó y oyó a la mujer caer en la bañera, posiblemente resbalándose en el suelo mojado.
Gabriele se golpeó la cabeza y se quejó de malestar. Tenía la piel ampollada y descamada. Su acompañante la envolvió en una manta y la llevó al hospital, donde le diagnosticaron quemaduras de tercer grado.
En el hospital, Gabriele estaba consciente, a pesar de las quemaduras que le cubrían el cuerpo y el rostro. Incluso grabó videos para su familia durante su hospitalización. Aun así, su estado empeoró y falleció seis días después. El certificado de defunción indica quemaduras como causa de muerte.
La hermana de la víctima, Jenifer Vaniele Barreto, lamentó la falta de explicaciones sobre la muerte. “No entendemos cómo ocurrió tan rápido. Solo dijeron que tuvo un paro cardíaco”, dijo.
La División de Homicidios de Curitiba ha abierto una investigación sobre el caso. El abogado de la familia, Valter Ribeiro Junior, declaró que el hombre que acompañaba a Gabriele aún no ha sido interrogado y que el examen forense en el lugar del accidente aún no se ha realizado.
“Si le pasó a ella, podría pasarles a otras personas. El equipo podría no tener el mantenimiento adecuado, lo que crea un riesgo. Es inaceptable que un lugar de ocio pueda causar una tragedia como esta”, declaró el abogado.
Hasta el momento el caso no ha sido llevado a los tribunales por falta de autoría definida, tipificándose el caso como un delito sin autoría conocida.
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