Familiares denuncian falta de acción de las autoridades mientras el caso sigue sin resolverse.
Este jueves se cumplen 30 días desde la desaparición del niño Roldany Calderón, un caso que ha causado consternación en la República Dominicana y más allá de sus fronteras.
En medio de la incertidumbre y las preguntas aún sin responder, la madre del menor rompió el silencio para defenderse de las acusaciones que ha recibido y cuestionar la falta de avances por parte de las autoridades encargadas de la búsqueda.
La madre del niño manifestó su frustración en una entrevista concedida al comunicador Hamilton Pacheco, conocido como “Wiu Wiu”, donde expresó abiertamente su sentir ante los señalamientos que ha recibido.
“Quien quiera criticar que critique. Quien tenga el corazón malo que lo haga, que lo diga, a mí no me importa, yo soy madre, y las que son madre y tienen el corazón limpio, que no son capaces de hacer algo malo hacia un hijo, pueden decir que sí, que uno lo puede hacer, porque esas son personas inconscientes, personas que lo que tienen es maldad en su corazón”, afirmó.
Además, reveló un conflicto familiar relacionado con el caso. Según explicó, una de sus hermanas expresó desconfianza no hacia ella, sino hacia Efraín, el padre del menor.
“Sí. En ese momento ella llegó donde mi mamá, donde nosotros nos estamos quedando. Ella me dijo ‘yo sé que tú eres mi hermana y puedo jurar que tú no eres capaz, pero yo de Efraín desconfío‘”, relató la madre.
En respuesta, ella le indicó que no creía que Efraín fuera capaz de hacerle daño a su hijo y recordó cómo era la relación entre él y el niño. La hermana, según la madre, respondió: “‘La persona que juega es capaz de cualquier cosa’“, haciendo alusión a que el padre participa en peleas de gallos.
Ante estos señalamientos, el padre también ofreció declaraciones. Admitió que efectivamente juega gallos, pero negó cualquier relación con la desaparición de su hijo. “No voy a decir que no, a veces he tirado con cositas de dados, pero no paso de 500 pesos“, indicó, restando importancia a sus hábitos de juego.
Mientras tanto, la familia de Roldany Calderón insiste en que no percibe esfuerzos reales por parte de las autoridades para encontrar al niño.
El caso continúa bajo investigación, pero la falta de resultados concretos genera indignación entre los allegados y en la población, que exige respuestas claras y acciones efectivas para dar con el paradero del menor.
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