Nueva York. Gritos de angustia y golpes desesperados contra una puerta metálica rompieron el silencio en la entrada del tribunal de inmigración en el 26 de Federal Plaza, cuando un grupo de agentes del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), encapuchados y sin identificación visible, detuvo a un inmigrante indocumentado que acababa de presentarse voluntariamente ante la corte.
La escena fue captada por testigos y generó conmoción entre los presentes. Según relataron, el hombre opuso resistencia al arresto, visiblemente alterado por la repentina intervención.
A su lado, su pareja intentaba aferrarse a él mientras era reducido por los oficiales, gritando entre sollozos y golpeando con fuerza la puerta del edificio federal, sin que nadie interviniera para consolarla o brindarle apoyo.
El hecho ocurrió en horas de la mañana y provocó una inmediata reacción entre activistas, abogados y defensores de los derechos migratorios que se encontraban en el lugar.
El operativo, calificado como intimidante, se realizó en un espacio público considerado históricamente como seguro para los migrantes que cumplen con sus citas judiciales.
Aunque el ICE no ha ofrecido declaraciones oficiales sobre este procedimiento, abogados presentes manifestaron su preocupación por el incremento de arrestos sorpresa en entornos judiciales, lo cual puede generar miedo y desaliento entre quienes están dispuestos a colaborar con el sistema legal.
“Esto vulnera la confianza y siembra terror entre personas que ya están en procesos regulares”, expresó uno de los representantes legales presentes en el lugar.
El arrestado, cuya identidad no ha sido revelada, tenía una comparecencia agendada ante la corte. De acuerdo con fuentes extraoficiales, no contaba con antecedentes penales y su expediente estaba en etapa de revisión para posibles medidas de alivio migratorio.
A pesar de ello, fue abordado sin previo aviso por los agentes y trasladado fuera del edificio sin oportunidad de asistencia legal inmediata.
A partir de este hecho, organizaciones proinmigrantes reiteraron su llamado al Departamento de Seguridad Nacional para que se respete el principio de “zonas seguras” en cortes, escuelas y hospitales, y se suspenda el uso de tácticas agresivas que afecten el debido proceso y los derechos fundamentales de los inmigrantes en Estados Unidos.
VIDEO
En el foco