EE.UU., Indianápolis. – La comunidad de Indianápolis se encuentra consternada tras un trágico incidente en el que un niño de solo 2 años perdió la vida accidentalmente al disparar un arma de fuego que estaba en el bolso de su madre, Keiara Bickett. Ella ahora enfrenta cargos por negligencia grave hacia un menor que resultó en la muerte del pequeño.
El incidente tuvo lugar en el aparcamiento de una farmacia CVS, cuando Bickett intentaba aparcar su coche junto a sus dos hijos, de 2 y 9 años. Según el informe de la policía, la madre oyó un disparo y, al mirar hacia adelante, vio a su pequeño caído en el asiento delantero. A pesar de ser llevado de inmediato a un hospital cercano, no logró sobrevivir a la herida que le causó el proyectil en su ojo derecho.
Las indagaciones indican que el niño salió de su asiento de seguridad, se acercó a la consola central y accedió al bolso abierto de su madre, donde se encontraba la pistola. La hija mayor, que fue testigo de lo sucedido, comentó que en el momento del disparo estaba distraída con su teléfono, mientras su hermano pequeño se sentaba sobre sus piernas.
En su declaración, Bickett admitió que suele llevar el arma en su bolso, aunque afirmó no estar segura de si había cerrado la cremallera ese día. Además, no utilizaba una funda para la pistola, lo que permitió que el menor tuviera acceso a ella. Normalmente, comentó que cuando está en casa, guarda el arma en una caja dentro de su armario.
Después de la audiencia inicial del 5 de septiembre, un juez le prohibió tener contacto con su hija de 9 años, quien quedó bajo la custodia temporal de su abuela, Melissa Etheridge, mientras el Departamento de Servicios para Niños de Indiana evalúa la situación en la próxima cita judicial programada para el 22 de septiembre.
El fiscal del condado de Marion, Ryan Mears, describió el caso como una tragedia que «nunca debió suceder» y destacó la importancia de mejorar la educación sobre el uso responsable de las armas. «El almacenamiento seguro es, en términos literales, una cuestión de vida o muerte», subrayó.
Mientras tanto, los familiares y amigos de Bickett han comenzado una campaña en GoFundMe para ayudarla a cubrir los gastos legales y personales, describiéndola como una madre comprometida que enfrenta el dolor de la pérdida y un complicado proceso judicial.
Por otro lado, la abuela materna de los niños afirma que lo ocurrido debe ser considerado un accidente y que las acusaciones contra su hija son excesivas.
El caso, que aún se encuentra bajo investigación, reabre el debate sobre la tenencia responsable de armas en los hogares y el impacto que la falta de medidas de seguridad puede tener en la vida de los más vulnerables.
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