Miami. El inesperado deceso del reconocido arquitecto Jim Hernández, ocurrido este jueves en la ciudad de Miami, ha generado una profunda conmoción entre la comunidad de Bonao y los dominicanos residentes en Estados Unidos.
Las expresiones de pesar se multiplicaron en redes sociales, donde allegados, colegas y ciudadanos compartieron mensajes de reconocimiento hacia su trayectoria y legado profesional.
Instituciones locales, personalidades del ámbito social y cultural, así como figuras del sector construcción, manifestaron su pesar y expresaron solidaridad con la familia Hernández.
Parte de este mundo el arquitecto Jim Hernández en Miami y Bonao lamenta su partida
Jim Hernández
En los mensajes publicados, se destacó la dedicación del arquitecto y su influencia en el desarrollo urbano de Bonao, ciudad donde alcanzó amplio prestigio por su aporte al diseño y planificación de espacios emblemáticos.
Con una carrera marcada por la excelencia y la responsabilidad profesional, Jim Hernández se consolidó como uno de los nombres más respetados dentro del ámbito arquitectónico nacional. Fue miembro directivo de la Asociación Bonao de Ahorros y Préstamos para la Vivienda (ABONAP), institución en la que impulsó proyectos de infraestructura habitacional, contribuyendo al fortalecimiento de la gestión urbana y al acceso de familias a viviendas dignas.
Su participación en ABONAP le otorgó un papel clave en iniciativas de desarrollo y ordenamiento territorial, integrando su visión técnica con un firme compromiso social.
Estas acciones le posicionaron como un referente en la proyección arquitectónica y comunitaria de Bonao, donde su nombre quedó asociado a obras significativas que definieron la identidad visual y funcional de la ciudad.
Parte de este mundo el arquitecto Jim Hernández en Miami y Bonao lamenta su partida
Además de su labor como arquitecto, Hernández desarrolló un espacio de orientación ciudadana en el programa radial Ramo de Olivo, transmitido por Latina 88.7 FM, bajo la producción de José Lucía y la conducción de Damián Inoa.
En ese segmento, compartía consejos prácticos sobre urbanismo, vivienda y convivencia comunitaria, extendiendo su vocación de servicio más allá del plano profesional.
De trato afable y carácter solidario, Jim Hernández se distinguió por mantener una estrecha relación con su entorno, lo que le permitió ganarse el afecto y la admiración tanto de sus colegas como de los ciudadanos de Bonao y de la diáspora dominicana. Su sencillez y compromiso social hicieron de su figura un símbolo de cercanía y respeto institucional.
Su partida deja un vacío sensible en el ámbito de la arquitectura dominicana y en la vida de quienes compartieron con él proyectos, enseñanzas y amistad.
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