São Paulo- Un denso humo surgió bajo una aeronave de Latam Airlines durante el embarque del vuelo LA3418, obligando a evacuar rápidamente a todos los pasajeros presentes.
La aeronave se preparaba para salir hacia Porto Alegre cuando un equipo terrestre tercerizado presentó una falla que generó un foco imprevisto dentro del sistema de carga asignado.
La aerolínea confirmó que el origen correspondió a un incidente controlado relacionado con un equipamiento de carga, generando una nube repentina que detuvo por completo las operaciones previstas.
Personal capacitado reaccionó en segundos, evacuando la cabina por el puente de embarque, mientras otros viajeros descendían por una rampa habilitada especialmente para contingencias operativas.
Evacuación coordinada y sin afectaciones reportadas
La compañía reportó que todos los ocupantes lograron salir sin afectaciones, indicando que la maniobra se completó con rapidez gracias a la coordinación entre diversos equipos terrestres participantes.
La aeronave quedó asegurada en la posición asignada, mientras técnicos especializados verificaban posibles daños provocados por la falla siguiendo pautas de seguridad aeroportuaria establecidas.
Latam explicó que la situación fue controlada oportunamente, evitando que avanzara o comprometiera la estructura del avión y el material planificado para transporte hacia el sur del país.
Los viajeros fueron guiados hacia áreas internas del aeropuerto, donde recibieron orientación primaria sobre los pasos a seguir mientras se reacomodaban las operaciones del vuelo correspondiente.
Representantes de la aerolínea reforzaron que ninguna persona resultó afectada y destacaron que los mecanismos de respuesta funcionaron según la eficiencia prevista para estas situaciones.
La empresa indicó que mantiene apoyo activo para cada pasajero, ofreciendo reubicación en rutas alternativas y asegurando continuidad en desplazamientos planificados hacia Porto Alegre.
Revisión técnica del equipamiento involucrado
El comunicado oficial subrayó que la seguridad continúa siendo prioridad absoluta y que se revisarán procedimientos del proveedor implicado para establecer responsabilidades confirmadas.
Autoridades aeroportuarias participaron en las revisiones técnicas destinadas a identificar con exactitud el punto donde surgió la falla y verificar señales previas en el equipamiento.
El flujo del aeropuerto se mantuvo controlado, aunque el episodio generó breves demoras mientras se despejaba el área y se evaluaban posibles riesgos residuales presentes.
Viajeros que aguardaban en zonas cercanas relataron que la alarma sonó inmediatamente tras la aparición del humo, destacando la firme actuación del personal ante la situación.
La aerolínea informó que colaborará con entidades regulatorias, entregando registros del momento, incluidos tiempos de reacción y condiciones de trabajo del proveedor involucrado.
El equipamiento afectado formaba parte del sistema de carga terrestre bajo contrato externo, activando protocolos de verificación para empresas asociadas en cumplimiento operativo.
A pesar de lo inesperado del evento, la empresa aseguró que la respuesta siguió estándares aprobados diseñados para garantizar transparencia en la gestión de emergencias aeroportuarias.
Los planes de reacomodo avanzaron desde horas posteriores, con ajustes programados para permitir que los clientes retomaran sus desplazamientos sin contratiempos significativos registrados.
La aerolínea continuará acompañando a autoridades en evaluaciones técnicas para determinar la causa específica de la falla y confirmar si existió afectación adicional en áreas operativas.
El informe oficial detalla que el proceso de control concluyó antes del amanecer y que la zona involucrada permaneció clausurada hasta completar la inspección final requerida.
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